jueves, 16 de abril de 2009

Conocimientos elementales

En el debate público sobre la exigencia de ciertos conocimientos de catalán para los empleados de la sanidad pública se utiliza habitualmente la expresión "conocimientos elementales" para valorar los que se exigirán a los futuros funcionarios. La expresión tiene una función muy clara en el discurso de defensa de esa exigencia:
si los conocimientos que se exigen son "elementales" se pueden obtener con un esfuerzo reducido; los que se nieguen a hacer ese pequeño esfuerzo son unos burros faltos de toda buena voluntad que no merecen excesivo respeto. Olvidémonos, por lo tanto, de ellos, y a construir los Países Catalanes.

Me gustaría echarle un vistazo a la magnitud del esfuerzo necesario para obtener esos "conocimientos elementales", y a valorar lo ajustado del término "elementales".
Existe una cosa llamada Common European Framework of Reference for Languages: Learning, Teaching, Assessment (CEFR) que recoge unos estándares definidos para el aprendizaje de idiomas y su evaluación. Este marco distingue seis niveles agrupados en tres escalones:

  • Niveles básicos: A1 y A2
  • Niveles intermedios: B1 y B2
  • Niveles avanzados: C1 y C2

Puesto que el inglés es el idioma extranjero estudiado más frecuentemente en España puede ser útil relacionar esos niveles con los más comunes títulos de inglés, que son los de la Universidad de Cambridge:

  • El nivel B2 corresponde al First Certificate in English
  • El nivel C1 corresponde al Certificate in Advanced English
  • El nivel C2 corresponde al Certificate of Profinciency in English

El nivel B2 es lo que se denomina "intermedio superior" (http://www.britishcouncil.org/es/spain-exams-fce.htm) y el nivel C1, "avanzado inferior" (http://www.britishcouncil.org/es/spain-exams-cae.htm). Los conocimientos de inglés que acreditan estos títulos no se califican, por lo tanto, de "elementales". Entonces, ¿por qué calificar de "elementales" al nivel B de catalán que corresponde, según la Generalitat de Catalunya, al nivel B2 del CEFR, o al nivel C de catalán que corresponde al nivel C1 del CEFR?

La magnitud del esfuerzo necesario para conseguir estos títulos es la segunda cuestión interesante. A través de la Escuela Oficial de Idiomas de Palma de Mallorca podemos valorarlo.

El estudio de idiomas -inglés, catalán, ...- en la EOI se organiza en secuencias de seis cursos anuales. Cada curso consiste en unas 130 horas de clase al año a las que se pueden añadir clases de conversación fuera del que podemos denominar horario regular. Teniendo en cuenta que además de la asistencia a clase es imprescindible añadir el trabajo personal del alumno, un curso supone unas 250 o 300 horas de trabajo anual. Para llegar al nivel B2 (http://www.eoipalma.com/index.php?option=com_content&task=view&id=171&Itemid=88) -el que corresponde al nivel B de catalán- se deben completar cinco cursos, es decir, se llega al nivel B2 con "sólo" 1.500 horas de trabajo: sin duda un esfuerzo modesto que cualquiera con un poco de buena voluntad puede hacer. El nivel C1, que no se alcanza en los cursos regulares de la EOI, supondría otros dos cursos, probablemente los de mayor dificultad, con lo que habría que añadir otras 600 horas.

Para resumir, los conocimientos que se exigen no son elementales y adquirirlos tiene un coste muy elevado para la mayoría de la gente que no venga de un medio en el que se hable habitualmente catalán o mallorquín. O incluso para personas que han estado en contacto regular con el idioma o para las que es su lengua materna. Es decir, que es esperable que funcione como una barrera de entrada muy efectiva para profesionales de regiones en la que no se hable catalán de una u otra variedad. Lo que suscita otra cuestión interesante: ¿se ha pensado precisamente con este objetivo?

4 comentarios:

Juan dijo...

Bravo.

Xesc Artigues dijo...

Perfecta la comparación con el CEFR.

DAVID DIEZ dijo...

Muy acertado

Unknown dijo...

Este señor ha dado en el clavo. Basta observar el Última Hora del día 9 de abril para darse cuenta de la terrible realidad de los exámenes de catalán donde más del 75% de los que se presentan suspenden los exámenes de catalán quedando eliminados de facto. El Mundo también publica un informe sobre lo que está pasando con los exámenes del Nivel de catalán, El Mundo, sábado día 28 abril 2009.